Las cigüeñuelas (Himantopus himantopus) tienen fama de ser bastante agresivas defendiendo su territorio.
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Sólo permiten en éste la presencia de su pareja .
Y naturalmente defienden a sus pollos, tanto recién nacidos…
… como cuando ya son mayores, como éste que está ejercitándose para el vuelo.
Esta pequeña zancuda no sólo se atreve con ejemplares de su misma especie sino con cualquiera.
Las gaviotas son unas de las posibles depredadoras que esperan el menor descuido para hacerse con uno de estos pollos y aunque algunas se resisten…
… acaban cediendo ante el coraje de la cigüeñuela.
Pero las cigüeñuelas llevan su vigilancia tan celosamente que todo el que se meta en su territorio es atacado, tanto si es un posible depredador de su prole o no, como podemos ver en las siguiente fotografía donde la toma con un pequeño chorlitejo.
Y en estas otras con un zampullín…
… que se ve obligado a sumergirse para escapar de su agresor…
… y a alejase a toda prisa.
Me despido, no sin deciros que estas fotografías las he tomado en la desembocadura del río Gudalhorce (Málaga), un buen lugar para observar un variado tipo de aves. Saludos y hasta pronto.
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